CLITIE

Foto de Carles Rabada vía Unsplash.

Ayer hablamos de algunos mitos donde sus personajes se convierten en flores. Hoy vamos a conocer en profundidad el mito de Clitie, la joven que se convirtió en girasol, porque de las flores que aparecen en las Metamorfosis, mi favorita es el girasol. 

Después de que Venus y Marte se acostaran juntos y el Sol se chivase, Venus decidió tomar una venganza sobre el Sol: el Sol estaba enamorado de Leucótoe y éste con la figura de la madre de la muchacha entra una noche en su habitación, se presenta posteriormente con su verdadera apariencia y se acuesta con ella. 

Clitie que estaba enamorada por el Sol, se enteró y entró en cólera por lo que fue al padre de Leucótoe y le contó los amores de su hija y el Sol. 

El padre entierra viva a su hija y el Sol se encuentra muy apenado e intenta con sus rayos revivir a Leucótoe, pero no es capaz y le vierte un néctar para que pueda convertirse en incienso. 

Clitie no volvió a tener visitas del Sol y su relación llegó a su fin, lo que apenó a la joven que se quedó a la intemperie mirando al Sol hasta que se convirtió en un girasol. 

Sobre la historia del girasol, en latín hay otro texto que me encanta, te lo dejo a continuación: 
In horto flores per aera suaves odores adflabant. Olim, vero, dum sol vehementibus radiis terram collustrabat, novus flos ex humo ingens caput levavit ey brevi tempore longo calamo surrexit. Ceteri flores tantam invenustatem contempserunt et irriserunt. At novus flos ob tantam proceritatem omnes humiles flores spernebat et semper solem tantum spectabat. Ideo homines heliotropium appelaverunt. 

Y la traducción es como sigue: 
En el huerto las flores aspiraban suaves olores por los aires. Pero un día, mientras el sol iluminaba la tierra con sus potentes rayos, una nueva flor levantó su enorme cabeza del suelo y en poco tiempo con su tallo se elevó. El resto de su tan grande altura despreciaba a todas las flores bajas y siempre miraba únicamente al sol. Por esto los hombres lo llamaron girasol.