EL ITINERARIO DE EGERIA Y SU IMPORTANCIA
Desde su descubrimiento en 1884 El itinerario de Egeria es un texto que ha causado curiosidad y muchas investigaciones y estudios tanto por el misterio de quién lo había escrito y para quién por aquello de su formato epistolar como por su contenido.
Desde el punto de vista sociológico interesa por todo lo que nos cuenta de cómo vivían en el siglo IV d.C. los habitantes de Tierra Santa y cómo transcurrían las vidas de los primeros cristianos que ya comenzaban a estar organizados por comunidades y a tener una jerarquía eclesiástica, como se demuestra en la parte del viaje cuando Egeria nos narra las personas que la acogen en sus visitas y los cargos eclesiásticos que incluye en su narración de las celebraciones litúrgicas.
También es una fuente de geografía y patrimonio, pues en las descripciones de los lugares que visita nos dice cómo se conservan y qué hay en ellos. De hecho, algunos de ellos se conocen hoy en día, pero otros solo se conocen por la mención de Egeria y se sigue intentando dar con su ubicación exacta.
Por su parte, también es una gran fuente teológica por el conocimiento de las Escrituras que demuestra, por los santos lugares que muestra y la descripción de estos, pero sobre todo por la narración de cómo se realizaban las primeras celebraciones litúrgicas, pues nos da a conocer un estadio primitivo del Cristianismo y de las primeras comunidades cristianas que sirve para conocer los inicios de la liturgia, pues por ejemplo ya se nos dice que se entonan himnos y salmos antes de la lectura del Evangelio que va seguida de un sermón, tal y como se continúa haciendo hoy en día en la liturgia.
Y por si fuera poco todo lo dicho
anteriormente, El itinerario de Egeria tiene también una gran importancia para
la filología pues al estar escrito en el siglo IV d.C. el latín ya no es el
clásico usado por Cicerón, sino que es un latín vulgar y así permite estudiar
el estado del latín en esta época y el estudio de su evolución.