EL MUSEO NACIONAL DE ARQUEOLOGÍA DE LISBOA
Dado que Lisboa fue la Olissipo romana, en la ciudad se han encontrado numerosos restos romanos que hoy se pueden encontrar en el Museo Nacional de Arqueología que hoy visitamos ¡Vamos!
El museo se encuentra en un marco incomparable: en el ala oeste del famoso Monasterio de los Jerónimos, ubicado en el Barrio de Belém de la ciudad.
Fue fundado en 1893 por el arqueólogo José Leite de Vasconcelos y se inauguró oficialmente en 1906. El arqueólogo quería crear un museo arqueológico dedicado a la historia del pueblo portugués y gracias a sus esfuerzos el museo es el centro de investigación arqueológico más importante de Portugal e incluso ha recibido varios premios.
En cuanto a las obras que alberga, una parte pertenecen a la colección del propio Leite de Vasconcelos mientras que otras obras han sido donadas por el Estado, incorporadas de otros museos o son el resultado de campañas arqueológicas llevadas a cabo por el museo.
Las piezas que conserva son tanto artefactos metálicos como esculturas, mosaicos romanos, joyas, piezas numismáticas o inscripciones epigráficas.
Las estatuas más destacadas son las estatuas de Mértola, el Apolo de Herdade do Álamo (Alcoutim) y los sarcófagos de Tróia y Castanheira do Ribatejo. También son muy relevantes las piezas encontradas en el santuario de San Miguel da Mota, pues representan la colección más grande esculpida en mármol de Vila Viçosa-Estremoz.
Los mosaicos que más destacan son los mosaicos de las villas romanas de Torre da Palma, Santa Vitória do Ameixial, Milreu y Montinho das Laranjeiras. Los temas que presentan estos mosaicos provienen de la mitología clásica: el viaje de Odiseo, Orfeo y los trabajos de Hércules. Casi todos los mosaicos datan del siglo III a. C.
Actualmente no se puede acceder al museo, pues está en remodelación y tiene prevista su apertura en 2025, pero me parece un buen motivo para volver a la capital portuguesa, ¿no te parece?
¿Quién se viene a visitar el museo conmigo? Manos arriba en comentarios.