EL TEMPLO DE JÚPITER ESTATOR

Hace mucho que no vamos de viaje a la ciudad de Roma, así que este viernes para allá que vamos porque vamos a visitar el templo de Júpiter Estator. 

Esta visita no es casual, sino que vamos a este templo porque uno de los momentos álgidos de la Conjuración de Catilina en el año 63 a.C. se dio en este templo. En él Cicerón pronunció su primer discurso contra Catilina, ese que comienza como "quosque tandem abutere, Catilina, patientia nostra?", para delatar los planes del conspirador. ¡Así que allá que vamos! 

El templo de Júpiter Estator fue construido por Rómulo en agradecimiento a Júpiter por ayudarle a salvar a los romanos de los sabinos. 

 En esta batalla los romanos se estaban retirando por la Vía Sacra y cuando llegaron a la altura de la Puerta Mugonia, Rómulo suplicó a Júpiter que les ayudara frente a los sabinos a cambio de construirle un templo. 

Según la leyenda, Júpiter se presentó y detuvo a los sabinos permitiendo a los romanos reagruparse y vencer posteriormente a los sabinos. 

En el punto donde Júpiter se detuvo junto a esta Puerta Mugonia, fue donde Rómulo construyó este templo y se lo dedicó a Júpiter con este epíteto "stator" que significa "el que detiene", por haber detenido a los sabinos. 

Según los Fastos de Ovidio, Rómulo fundó este templo en la boca de la colina del Palatino mientras que Tito Livio nos dice que el templo estaba cercano al palacio real cuando Tarquinio Prisco murió. 

Por otro lado, hay un consenso de que la localización del templo se encuentra justo al lado del Arco de Tito y cuando una torre medieval fue demolida en 1827, las ruinas de un edificio de la Antigüedad aparecieron y se creen que eran los templos.