HOLA Y ADIÓS PARA SIEMPRE, HERMANO
Paisaje con ruinas de Nicolás Poussin conservado en el Museo del Prado.
Para terminar esta semana dedicada a la muerte y a los difuntos, comparto contigo este poema de Catulo.
En él el poeta llora a su hermano que ha fallecido en Troya y nos cuenta que ha ido allí, a Troya, para llorar en la tumba de su hermano y celebrar sus ritos funerarios. Sobre estos ritos nos dice Catulo que le lleva ofrendas para cumplir con la tradición y rendir tributo a su hermano.
Cuando celebramos la semana de Catulo y el directo Conociendo a Catulo con nuestra Luna, ella nos contó que su poema favorito de Catulo es este 101 por el sentimiento con el que el veronés escribe a su hermano.
A mí cada vez que lo leo me gusta más y ya puestos me parece que es un poema que hay que conocer porque nos muestra una cara completamente distinta a lo que solemos conocer de él como, por ejemplo, los poemas de los besos.
¿A ti qué te parece este poema?