LAS ISLAS CANARIAS EN LA ANTIGÜEDAD
Hace dos semanas estuve de vacaciones en la maravillosa isla de Lanzarote, y como ya sabes, después de cada uno de mis viajes, realizo publicaciones relacionadas con el destino donde he estado así que prepárate porque esta semana ¡nos vamos a las Canarias! ¡Vamos que nos vamos!
Es cierto que las Islas Canarias no fueron un enclave importante en la Antigua Roma, pero también es cierto que en la Antigüedad eran ya conocidas. En concreto el testimonio lo encontramos en la Historia Natural de Plinio el Viejo.
En su libro VI, nos habla de las islas que hay en el Océano Atlántico y de las Canarias nos dice lo siguiente: ante el cabo de la región de los arrotrebas se hallan las seis Islas de los Dioses, que algunos han llamado Afortunadas.
Como ves, el nombre de las islas en la época romana no era "Canarias" sino "islas Afortunadas" y se las conocía así por su buen clima y la fertilidad de su suelo. Además, en Homero están identificadas con los Campos Elíseos, la última casa de los hombres virtuosos y los héroes.
También el número de islas del archipiélago es distinto en cada autor: tres, seis o más de una sin entrar en detalles. Por su parte, Plinio además de decir que se encuentran en el Atlántico, les dedica a estas islas Afortunadas un apartado completo y en él nos da los nombres de las islas y las describe.
Las islas Afortunadas son: Junonia, Pluvialia, Capraria, Invale, Planasia, Ninguaria y Canaria que corresponden con las actuales islas Canarias de la siguiente manera: Lanzarote, Hierro, Gomera, La Palma, Fuerteventura, Tenerife y Gran Canaria.
Como ves, Gran Canaria mantiene el nombre que tenía en la Antigüedad del que además Plinio nos dice que se llama así por el gran número de parros – can, canis, en latín- que había en la isla.
En la galería puedes conocer qué nos cuenta Plinio sobre cada isla.
Ahora cuéntame, ¿conocías estos datos sobre las islas Canarias? Te leo en comentarios.