LAS VISITAS DE EGERIA
Ayer ya dijimos que el texto de Egeria comienza con su visita al Monte Sinaí y posteriormente se nos narran el resto de lugares que conoció, pues bien, eso es lo que hoy vamos a conocer. ¡Vamos a ello!
El primer lugar que Egeria contempló fue el Monte Sinaí al que ascendió hasta llegar a la cumbre, en su bajada realizó más visitas, pero en especial recalca la visita a la zarza mediante la cual Dios habló a Moisés. Tras esa parada para contemplar la zarza, realizó un camino por el llamado Valle de Pascua para continuar conociendo los lugares relacionados con Moisés.
Cuando terminó la peregrinación por esos lugares, fue a Farán para descansar dos días y posteriormente visitar el desierto y dirigirse a Clesma. En esta ciudad también se tomó unos días de descanso, para después poder visitar Arabia, aunque antes de llegar a esta ciudad pasó por Epaula, Magdala, Belsephon, Etan, Sucot, Piton y Hero.
También antes de llegar a Arabia se dirigió a Rameses donde conoció a un obispo que le explicó todo sobre aquellas tierras, las tierras de Jesé por las que deambuló hasta volver de nuevo a Jerusalén. Después de un tiempo en Jerusalén volvió a dejar la ciudad para volver a Arabia.
Pasó por el río Jordán y después ascendió al Monte Nebó. Tras este paseo por el monte, volvió a Jerusalén hasta que quiso conocer un nuevo lugar: el sepulcro de Job y además visitó el Palacio del rey Melquisedec y Enon. Tras otro tiempo en Jerusalén, quiso visitar Mesopotamia, en su camino recorrió la ciudad de Hierápolis y llegó a orillas del río Éufrates.
También en este viaje visitó Edesa donde pudo conocer el Palacio
del rey Abgar para luego ir a Carra y al pozo del santo Jacob para regresar
de nuevo a Jerusalén. Luego decide ir a Antioquía e hizo la siguiente ruta:
Tarso, Capadocia, Galacia, Bitinia y Constantinopla. Además, termina su texto
diciendo que quiere ir a Asia y que no sabe si vivirá o no para contarlo.