VENUS ERICINA
Hoy vamos a conocer uno de los epítetos de la diosa Venus, en concreto vamos a conocer el de Venus Ericina, ¡Vamos a ello!
Este epíteto o sobrenombre a la diosa del amor le viene del templo que según la mitología el héroe Eneas levantó en honor de su madre en el monte Erix de Sicilia. Según nos narran las fuentes, este templo fue restaurado por el emperador Claudio y en él se conservaba una gran cantidad de vasos y objetos preciosos.
Además, sabemos que en él se celebraban dos fiestas: las Anagogia para conmemorar la partida de la diosa desde el templo hacia Libia en la época de migración de las palomas pues se creía que las palomas eran las aves protectoras y acompañantes de la diosa y cuando no se encontraba ninguna en la zona del templo se debía a que se habían ido con ella a Libia.
Posteriormente, en la época de volver las palomas a Sicilia, se celebraban las Catagoagia para celebrar lo contrario, el regreso de la diosa y las palomas al templo. La diosa con este epíteto era venerada tanto en Erice como en Psofis en la Arcaida y en la propia Roma contaba con dos templos, uno en el Capitolio erigido por Quinto Fabio Máximo y otro construido por Lucio Porcio Licino durante la guerra de los Ligurios.
Hoy en día el símbolo de Erice es el Castello di Venere, construido por los normandos. Al construirlo, utilizaron materiales del Templo de Venere Ericina, del que toma su nombre. El castillo estaba rodeado de torres, junto a las cuales se encuentra el Balio, un maravilloso jardín paisajístico inglés desde el que se puede disfrutar de una vista excepcional: a un lado se ve la costa tirrena del golfo de Trapani, con la punta de San Vito lo Capo en el horizonte, y al otro el puerto de Trapani, con las salinas y las islas Egadas. Aunque ya no esté el templo de Venus allí, Erice y su Castello di Venere merecen una visita.
Ahora cuéntame,
¿conocías este epíteto? ¿Has estado en Erice? Te leo en comentarios.